Con el inicio de la primavera la naturaleza florece de nuevo y The Strokes presentan nuevo disco para ver si con eso de que la vida renace, consiguen reverdecer laureles.
Formados en Nueva York en 1998 y
provenientes de familias muy acomodadas (Albert Hammond Jr guitarra, además de
ser hijo del famoso Albert Hammond, conoció al futuro cantante Julian
Casablancas en un exclusivo internado en Suiza…), The Strokes, con sus
influencias del rock de los 70 de ambos lados del Atlántico, fueron en gran
parte responsables de hacer volver el rock a su pasado, tanto en el sonido como
en la estética y la actitud. Tuvieron el ojo de llegar en un momento en la que
la gente estaba ya cansada de ver a grupos de rock en los que el cantante
llevaba gorra y rapeaba, demostrando una vez más que todo vuelve en esta vida.
La manera que tuvieron de hacer
esto, más allá de una muy estudiada imagen desaliñada, fue sacando en 2001 un
disco impecable, que recuperaba transformando levemente las canciones de su EP
de presentación “The modern life”, “Is this it?”. La formula no es nada nuevo,
pero resulta tremendamente efectiva: letras que
hablan de desencanto vital (light, que estamos hablando de pobres niños
ricos), borracheras y excesos, despertarse sexuales, críticas a la policía de
NY… y ritmos enormemente pegadizos y bailables.
Es prácticamente imposible sacar un fallo a este disco, empezando por la
portada, provocativa y ambigua, y siguiendo, claro esta, por las canciones
desde la primera a la última auténticos pelotazos: “Last Nite”, “Hard to
explain”, “Take it or leave it”, “Is this it?”, “Someday”… Y así hasta recitar todo la tracklist del disco,
en el que no sobra nada. En cuanto a ventas lo petaron, y fueron el primero en
casi todas las listas de discos del año, algo totalmente merecido.
Decididos a aprovechar su momento
dulce, volvieron a publicar disco en 2003, “Room on fire”. Aunque no alcanza el
nivel de su antecesor, es un buen disco en el que encontramos también unos
cuantos pepinazos (“The End has no End”, “12.51”, “Reptilia”), pero que carece
de la capacidad de sorpresa que tuvo su antecesor.
En 2006 llegó el tercer disco
“Firsts Impressions on Earth”, y aquí se empezaron a ver más las costuras al
asunto. Seguía teniendo grandes canciones (algunas muy grandes incluso, como “On
the other side” o “You only live once” o “Vision of división”), pero ya
empezaba a aparecer cierta sensación de cansancio y desgana. Sensación de
cansancio y desgana que se acrecentaba si uno los veía en directo: ejecutaban
bien las canciones, pero la frialdad y condescendencia que demostraban,
terminaban por aguarte un poco la experiencia.
A finales del 2006, Julian Casablancas, decidió hacer un descanso, descanso que se prolongaría hasta 2011. Durante este tiempo, además de dar algún concierto completamente mercenario, algunos se dedicaron a proyectos personales, como el propio Casablancas, o Hammond Jr, que también se atrevió con un disco en solitario, que sorprendentemente, es bastante superior a la mediocridad que parió Casablancas con un supuesto acercamiento al baile bastante espeluznante.
En 2011 decidieron que ya había
habido suficiente descanso y volvieron a la carga con “Angles”. Pero no es que
se hubieran arreglado las cosas entre ellos, no. El disco fue grabado en
sesiones separadas, con los músicos por un lado y el cantante por otro. Alguno
habrá que me diga que hay obras maestras que han sido grabadas así, como, por
ejemplo, el canto de cisne de The Smiths
“Strangeways, here we come”. Bueno, pues este no es uno de esos casos. Siguen
manteniendo una buena capacidad de crear singles como “Maccu Piccu” o “Under
cover of darkness”, pero el resto del disco suena faltó de energía. Parece más
un disco hecho por algunos de esos imitadores que les salieron después de su
triunfo que uno de esos Strokes de principios de siglo que revolucionaron la
música. Para más inri, si el directo nunca había sido su fuerte, por la poca
conexión que mostraban con el público, en la gira que acompañó a este disco, no
es que se mostrasen distantes, es que parecía que preferirían estar planchando
antes que en el escenario defendiendo su último trabajo (yo juraría que en
algún momento de la actuación les llegué a ver mirando el reloj…).
El día 23 de este mes volverán a
intentar reconquistar a su público con “Comedown machine”. Ellos lo venden
diciendo que esta vez, si. Que han hecho un gran disco, que han vuelto a
disfrutar de la música, que lo han grabado todos juntos, que son amigos de
nuevo… Vamos lo que dice siempre cualquier grupo en la cuerda floja cuando
estrena trabajo. La verdad es que el single que han presentado, "All the time" "One way trigger", no es ninguna
maravilla (una especie de versión del “Take on me” de A-HA ¿¿¿???), pero bueno
habrá que esperar a oír todo el disco. Eso sí, más les vale que se apliquen,
por que están a un paso de entrar en la categoría “pa´lo que hemos quedao”
donde compartirían hueco con compañeros de generación como Interpol, Kings of
Leon, The Killers y demás artistas que una vez demostraron talento pero que uno
no sabe si fue una casualidad cósmica o que ya se la suda todo y han decidido sacar churros de discos que les
permitan seguir girando y forrándose…
Los Strokes son increíbles. Incluso en sus dos últimos álbumes (los más flojos) mantienen un nivel bastante aceptable.
ResponderEliminarPor cierto, el ''Take On Me'' de los Strokes es el ''One Way Tigger'', no ''All The Time''.
Saludos!!
¡¡¡Muchas gracias por el aviso!!! Se me había ido la pinza, pero ya esta corregido. The Strokes molan bastante, pero te recomiendo que no los veas en directo, porque pierden todas su magia. A no ser que hayan cambiado, claro.
Eliminar¡Saludos!
Qué gran resumen de esta gente!!!! Y de paso he aprendido cosas que desconocía... Es cierto, el primer disco es su mejor aportación. Veremos este....
ResponderEliminarNos llemos!!!!!
Me alegro de que te haya sido instructivo. Pero lo que más me alegraría sería que volviesen a repetir la joya que fue su primer disco, aunque todos sabemos que eso no va a pasar...
EliminarUn abrazo y gracias por pasarte por aquí
Esto también es una gran síntesis! The Strokes pegaron muy fuerte al principio y menos recientemente. Escuché el último disco, "Angles", pero no me llama mucho... Espero que el próximo mejore.
ResponderEliminarSaludos
Tengamos los dedos cruzados, pero no apostaría yo nada valioso a que nos entreguen otro pepinazo como su primer disco...
EliminarSaludos