jueves, 6 de febrero de 2014

En la salud y en la enfermedad

Anne y George son un matrimonio de ancianos de clase media que viven en un bonito apartamento de Paris. Llevan una vida tranquila y apacible hasta que Anne empieza a sufrir crisis de ausencia provocadas por problemas de riego en el cuello. Su estado de salud y su autonomía irán deteriorándose de manera progresiva y esto hará que George tenga que asumir su cuidado.

Esta era otra de las películas que llevaba tiempo queriendo ver, sobre todo tras ver toda la prédica que tuvo entre la crítica en el momento de su estreno y el aluvión de premios que se llevó. Y aunque este "Amor" me confirma que Haneke nunca será mi cineasta de cabecera (su cine me parece demasiado severo, poco abierto a interpretaciones y en ocasiones como cae en excesos al mostrar la inmoralidad...), hay que reconocer que se trata de una propuesta interesante, aunque solo sea por tratar de dos tabús de nuestra sociedad como son la enfermedad y la vejez.

Llama la atención que Haneke, que siempre se ha dedicado a mostrar lo más sórdido y desagradable de la condición humana, haya elaborado una película cuyo tema fundamental sea el amor. Por supuesto que no vamos a ver "Love Story" en la tercera edad. Aqui vemos el amor frente a la decrepitud y la muerte. Pero amor a fin de cuentas. Porque el amor está en alimentar a tu mujer con una cuchara cuando ella no puede hacerlo, o en limpiarle cuando se ha orinado encima para darse cuenta. En todo momento se muestra esto de manero frontal, sin caer en el tremendismo ni en el melodrama, con momentos que llaman la atención, como la muy bien llevada la secuencia en la que Anne empieza a padecer síntomas, que se presentan de manera inesperada y cruel durante un apacible desayuno.

Además de esto hay en la película otros muchos planos que se graban en la retina: aquel que muestra a la pareja como espectadores de un concierto de piano, tomado desde el escenario, y que da a entender que esta es su historia o podría ser la de cualquiera de los espectadores; el plano onírico en el que se ve a Anne tocando el piano; o la secuencia en la que se dedica a revisar fotografías de toda su vida, que es realmente emotiva.

A pesar de todo esto, la cinta no me terminó de convencer del todo por dos motivos. El primero  y más perdonable es un exceso de metraje, que se hace notar sobre todo en el tramo final, que se vuelve un poco reiterativo. Pero el segundo me molestó más, y es la decisión final que toma George, que me resulta incongruente con todo lo que se ha mostrado. Me explico: si Haneke hasta ese momento se ha dedicado a reflejar de manera tan objetiva el proceso de enfermedad huyendo de toda parafernalia, chirría que el personaje (o sea el director, que es el autor de la historia también) tome una opción muy "de cine", que hace que no lleve a sus últimas consecuencias lo que se nos había venido mostrando. Por mucho que lo haya intentado, el realizador no ha podido resistirse a dejarse llevar por lo que se podría llamar "dramatismo cinematográfico".

Esto no quita para reconocer que la película esta muy bien realizada, y que sabe sacar un enorme partido a los espacios (toda la película trascurre en el apartamento de los ancianos), y aun mejor interpretada, con la pareja protagonista dando un auténtico recital.





Una película interesante, deprimente, algo sobrevalorada (a mi entender) y que pierde en su tramo final, pero digna de ver a fin de cuentas. Ni que solo sea por el citado valor al afrontar la enfermedad, la vejez y la muerte.

14 comentarios:

  1. Esta película me dejo hecha polvo. Hay escenas tremendas, pero hay una en concreto que me dejó sin palabras y me hizo saltar las lágrimas. Imagino que sabrás a cuál me refiero. Michael Haneke, desde luego ha sabido reflejar muy bien la condición humana y hacer una historia tan dura. Estoy de acuerdo contigo en que hay un exceso de metraje, pero he de decir, que me encantó. Eso sí, esta peli es para verla una vez! Porque no pienso verla más.

    Besos.

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    1. La verdad es que es un rato dura. La escena que comentas me pareció, aunque emotiva, lo más endeble de la película.
      Yo tampoco creo que repita visionado. En un tiempo largo por lo menos.
      Saludos

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  2. Me tira mucho, pero aún no la he visto. Debe ser dura. El deterioro de la vejez, el amor y la muerte es un cóctel demasiado explosivo en cuanto al dramatismo. Supongo que por momentos se le pondrá a uno la piel de gallina. Un abrazo, Sese. Muy buena la entrada.

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    1. Gracias por los halagos. Si que es una película que merece la pena ver, pero es de esas que con una vez, es suficiente. Y aunque está bien, yo le encuentro algunos fallos que la malogran parcialmente.
      Otra abrazo para tí.

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  3. No estoy de acuerdo en que esté sobrevalorada, aunque entiendo que pudiera resultarte algo pesada al final. La película no solo es dura, sino mucho más compleja de lo que parece, Haneke en estado puro.

    Te invito a que leas mi opinión sobre la película

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    1. Ya he leido tu opinión y te he dejado allí mi respuesta, y comparto casi todo lo que mencionas sobre sus aciertos, pero aun así sigo considerando que está demasiado alargada y que la decisión final chirría bastante. Y el que una película sea muy representativa de su autor no la hace mejor. A veces, puede ser incluso al contrario.

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  4. Es una película cruda. No disfruté viendola. Te deja con una sensación muy mala, pero real.

    ¿Lo de Nutshell?
    Saludos :)

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    1. Razón no te falta, ya que no es una película para disfrutar. Pero aun así, es interesante.
      Lo de "Nutshell" es porque trata el tema de la fragilidad y es bella y triste como la película. Y porque me apetecía oirla!!! ;P
      Saludos!!!

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  5. Dí que sí. Cualquier excusa es buena para oírla !!!

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    1. Asi es. Y si consigo que alguien que la desconocía la empieza apreciar, pues miel sobre hojuela!!!!!!

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  6. Obra maestra, otra más a añadir a la impresionante trayectoria de Haneke. No, no estoy de acuerdo: Haneke no juzga, la película expone y (así lo indique cuando realicé la entrada de esta película) es el espectador el que emite su sentencia, como tú has hecho (como yo mismo hice al salir del cine). Lo que Haneke logra es que la autenticidad de la situación sea total, no cae en eufemismos y no ahorra crudezas si eso aporta a sumergir al espectador en la historia (nunca son gratuitas). Deprimente, sí, y desoladora. Una película de terror, un retrato desnudo de la decrepitud y de la vejez, pero también una película de amor. Con mayúsculas.
    Saludos.

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    1. Pues para mi si que es una buena película, pero no una obra maestra. Y le reconozco el mérito de rodar el calvario de la enfermedad, pero por mi trabajo me ha tocado ver en muchas ocasiones el proceso que lleva a una persona hasta la muerte, y nunca acaba como lo hace. En una película que hace su razón de ser el mostrar este trance, me parece incohorente no mostrar ese final. En lo que si que tienes razón es en que una gran historia de amor.
      Saludos

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  7. A Haneke lo tengo en mi lista negra de directores porque me parece que tiene en muchas ocasiones una forma malsana de rodar sus historias ("Funny Games" es un ejemplo). Algo parecido al David Cronenberg de sus demenciales comienzos. Bien es cierto que "Caché" o "La Cinta Blanca" están bien, pero no sé por qué le tienen en los altares. Algo hay que me pierdo.

    ¡Un saludo!

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    1. A mí me pasa lo mismo que a tí. Le reconozco el valor, pero nunca será uno de mis directores favoritos. Eso sí, yo me quedo antes con Cronenberg, de la época que sea que con Haneke. Sus películas además de ser complejas y ricas, tienen más de una interpretación, no como las de Haneke, que no dejan margen a la interpretación del espectador.
      ¡Un saludo!

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