La Marvel vuelve con su segunda dosis anual tras la muy resultona "Capitán América: Civil War", para abrir una de las facetas de su universo que aun seguía inexplorada, la místico fantástica, a través del "Dr. Extraño". Si hace diez años hubieran dicho que una de las producciones más esperadas del año iba a ser una protagonizada por un personaje tan bizarro y minoritario como Stephen Extraño, lo hubiera tomado por una broma, pero vivimos tiempos de bonanza para la parroquia marvelita, y por eso ahora tenemos una producción basada en él, plagada de estrellas y con un presupuesto de hordago.

Imagino que los odiadores del cine superheroico que hayan leído hasta aquí estarán ya afilando loscuchillos: "El cine de superheroes es todo igual". "Todas las películas de Marvel son la misma solo que cambiando los muñecos". "Es una vergüenza que los adultos consuman un cine pensado para preadolescentes"... ¿Y tienen razón? A mi parecer no, como iré comentando luego a la vista de los
más que correctos resultados de la película. Pero tengo que reconocer que podrían tenerla. Y aquí me voy a detener un poco. Si es que hasta ahora no lo era, el cine de superhéroes, de diez años a esta parte se ha convertido en un género en si mismo, quizás menor, pero un género a fin de cuentas como pueden ser el de catástrofes, el de artes marciales, el de gangsters, la comedia romántica o el slasher. Y como tal tiene sus códigos visuales y fórmulas narrativas que se cumplen en (casi) todas sus muestras. Y a todos se nos pueden atragantar géneros (a mí mismo me pasa con la comedia romántica....) Sin embargo, como en la cocina, aunque los ingredientes sean los mismos, las cantidades y la preparación van a ser lo que condicione el resultado: no es lo mismo "La noche de Halloween" que "Sé lo que hicisteis el último verano", ni es lo mismo "El hombre tranquilo" que "27 vestidos", ni "La aventura del Poseidón" que "Armagedon"... Que los arboles no nos impidan ver el bosque, y que los géneros no nos hagan despreciar potenciales buenas películas.
Porque a pesar de que los que tachen "Doctor Extraño" de repetitiva e impersonal, no dejen de tener algo de razón, resulta igual de difícil reconocer que Marvel Studios ha perfeccionado la fórmula de sus películas hasta lograr que funcionen como un mecanismo de relojería. Algo frías y mecánicas, quizás, pero precisas y efectivas.

Y siguiendo con esto toca hablar de la labor de Scott Derrickson tras las cámaras. Kevin Feige, que es el mandamás en estos estudios, optó por un realizador que provenía del cine de terror y fantástico para orquestar esta superproducción, presuntamente para resaltar la faceta fantástica de la cinta. Y la verdad es que no lo hace nada mal. No desentona en ningún momento, como ya he ido comentando, y logrando que funcionen muy bien elementos, que quizás no había manejado anteriormente, como los cómicos, con todo lo relativo a la capa, divertidísima, y convertida desde ya en un icono. ¿Que cualquier otro realizador solvente hubiera podido realizarla? Probablemente. Y es que es indudable que todas las películas de Marvel Studios pecan de impersonales, con unicamente dos de sus producciones como "Iron Man 3" o "Guardianes de la galaxia" con algo más de alma de sus realizadores en ellas.
Yo compararía estas cintas con las películas de la serie Bond en cuanto a que se tratan de películas más de productor que de director, y que persiguen siempre ofrecer el mejor entretenimiento posible, triunfando o no en el intento. Quizás ninguna de las dos sagas haya cambiado el lenguaje cinematográfico, pero algunas de ellas si que terminan ocupando un lugar importante en el alma cinéfila de los espectadores. O por lo menos en la mía.