Beca y Tyler son una hermana y un hermano preadolescentes que van a pasar una semana con sus abuelos, a los que hasta ahora nunca habían conocido, mientras su madre realiza un crucero con su nueva pareja, con la que intenta rehacer su vida tras haber sido abandonada por el padre de los chicos. Lo que en principio parece una semana de intimidad familiar en un entorno idílico para los chavales, en la que la muchachaa pretende elaborar un documental sobre su familia, poco a poco se ira convirtiendo en algo mucho más inquietante.

El realizador vuelve a presentar un historia de género que se sustenta sobre narraciones populares, que en realidad es el envoltorio de un drama, que a su vez contiene un giro final para sorprender al espectador, que además le hace plantearse todo lo que ha visto hasta el momento, y con el que realizador busca hablar de temas trascendentes, Si anteriormente había tomado como punto de partida los tebeos de superheroes ("El protegido"), Caperucita Roja ("El bosque") o la Sirenita ("La joven del agua") en este caso es "Hansel y Gretel" la historia base a homenajear/actualizar/deconstruir: tenemos un hermano y una hermana, que abandonados a su suerte por sus padres, van a parar a un casa en la que son cebados con todo tipo de sabrosas viandas realizadas por una anciana, que pretende cebarlos para luego cocinarlos en un horno...
La novedad en este caso es que, ha realizado una película de bajo presupuesto, y sin estrellas, que además está rodada con estilo de metraje encontrado/falso documental,. El tema es si es una decisión personal o se ha visto empujado a ello porque no ha encontrado ni estudios ni estrellas dispuestas a confiar en el dinero y medios después de que sus dos intentonas de realizar blockbusters naufragaran estrepitosamente...

aunque en ocasiones si que se deja llevar por los sustos fáciles que permite este género (ahí están las súbitas apariciones nocturnas de la abuela, resueltas de una manera muchas veces vista ya...), la película, con la excusa de que una de las que maneja la cámara es una aspirante a directora de cine, presenta encuadres muy perturbadores, que hacen un gran uso de la cámara en primera persona (algo que algunos piensen que se deba al formato de falso documental, pero siempre ha sido uno de las señas del realizador indio: vease sino, la genial secuencia que abre la magistral "El protegido"), el off visual y de la profundidad de campo, como demuestran secuencias como la entrada furtiva en el granero, la persecución bajo la casa o la pelea final en la cocina, respectivamente.
Luego está el que quizás sea el mayor punto débil de este realizador, y es su faceta como guionista. Cierto es que en la trilogía que cimentó su fama ("El sexto sentido", "El protegido" y "Señales") logró parir historias potentes y que funcionaban a todos los niveles que el pretendía: película de género, drama, comedia y cierta reflexión trascendental siempre provocada por el twist final. Pero en las películas que han venido después, los libretos no han terminado de funcionar: si el drama funcionaba fallaba el suspense; y si la reflexión conseguía llegar al espectador era porque la historia y la emoción quedaban en un segundo plano. En este caso, ocurre lo primero que he comentado, como historia de terror y hasta de comedia es bastante aceptable, en cambio, la reflexión sobre los valores familiares que buscan la sorpresa final y el epílogo, es bastante anodina.
De todos modos, aun lejos del citado triunvirato magistral que se marco a caballo entre el siglo XX y el XXI, si que se puede considerar que esta película es una recuperación, aunque sea parcial, del Shymalan que encandiló a las audiencias hace más de una década. Ojala esta película le sirva para recuperar crédito en la industría, y logre poner en marcha proyectos como la tantas veces rumoreada y ansiada (por lo menos por el que suscribe) continuación de "El protegido". Soñar es gratis.