Había que ir a ver esta película con cierta precaución.
Porque, a pesar de tenerle muchas ganas por los divertidos trailers con los que
la habían adelantado y por los elogios que se oían por todas partes, podía ser
una de esas películas que acaba siendo victima de un exceso de expectativas. Lo
que a día de hoy ha dado en llamarse hype...
No hay que tener miedo: la película es una GOZADA. De
principio a fin.
A pesar de llevar leyendo tebeos Marvel practicamente desde
que se leer, no conocía a ninguno de los protagonistas, y como yo le pasa a mucha gente, así que, a priori parecía una apuesta arriesgada el dedicarles una superproducción a estos personaje. Pero Marvel, en una jugada inteligentísima, ha puesto al frente de la película a James Gunn, un hombre formado en la serie B (y también la Z, la Troma, para ser exactos...)) y le ha dado bastante libertad (siempre dentro de los márgenes de una producción Marvel). De sus trabajos previos conozco la serie de cortometrajes "PG-porn", que, protagonizadas por actrices porno, son
unos divertidos ejercicios de ironía y autoconciencia, al tratarse de
delirantes piezas de porno, ¡¡sin
porno!!. Sus otros trabajos son el guión de la mejor películas de zombies de
los últimos 40 años, el remake de "Amanecer de los muertos" (que
espero algún día caiga por aquí). Y la curiosísima "Super", una cinta
que era a la vez vitriólica parodia y apasionada carta de amor al género
superheroíco, todo desde una perspectiva netamente trash.
Lo primero los actores están todos estupendos: Chris Pratt
derrocha carisma encarnando a Peter Quill siempre pegado a su walkman como lazo
de unión a la Tierra y a la madre de la que se vió desposeido; Zoe Saldanha
dando vida a Gamora y convirtiendose en la musa de la ciencia ficción, solo
igualada por Sigourney Weaver; Dave Batista más que aceptable como un Drax; y
como no los Han Solo y Chewbaca del siglo XXI, Groot y Rocket, que roban todas
sus secuencias. Los secundarios (quitando Michael Rooker haciendo de Michael
Rooker) y el villano (ese Ronan el Acusador es quizás el punto más flojo del conjunto...) quedan un poco deslucidos eso sí. Sobre todo me da pena en
el caso de Benicio de Toro dando vida a El Coleccionista, un personaje que
desde aquellos enfrentamientos entre heroes que organizaba, siempre me ha fascinado.
A ver que hacen con él en las siguientes películas, porque el actor y el personaje tienen potencial y aquí se queda la cosa casi en un cameo desaprovechado.
Luego está el guión, que rebosa unos diálogos simpatiquísimos,
conscientes de que el terreno en el que se encuentran no puede ser tomado del
todo en serio, pero sin caer en un exceso de ironía que podría hacer que nos
desentendieramos de los personajes. Y la verdad es que hay ratos que pueden llegar a emocionarnos si nos encuentran con la guardia baja... No solo eso, sino que hay momentos en el
que el sentido de la maravilla (ese
polen fluoresecente que segrega Groot) y la aventura poseen el relato, sin que
le hagan a uno arquear la ceja... Además vamos conociendo cosas de su pasado
que a la vez hacen avanzar la trama sin caer en flashbacks mil veces vistos. Y
luego está el tramo final, que funciona a las mil maravillas, sin quedar como
una mera traca final.
Las secuencias de acción están muy bien rodadas. Y eso que
la película transita géneros muy distintos: empieza como una película de aventuras, para pasar a convertirse en
un thriller carcelario y acabar en una epopeya sideral. Además están llenas de
detalles surrealistas (el momento empalamiento de Groot, y no digo más...) que
les dan un puntito distinto.
El diseño de producción es otro de los puntos fuertes. Se ha
apostado por el color, que llena la pantalla en todo momento y le da un tono
pop de tebeo añejo (de cuatricromia, vamos) delicioso.Y dentro de ese diseño pop metería de lleno la selección musical del walkman de Star Lord (una idea deudora de Tarantino en un 100%), que (cor)rompe el tono épico que acompaña a este tipo de películas logrando darle al conjunto un tono desenfado.
Una gozada que todo amante del buen cine de entretenimiento debería ver. Es un delito dejar pasar cintas como estas, que ennoblecen el noble arte de entretener y hacer soñar a la platea.
"Nosotros somos Groot"